No pudo ser. Por segundo año consecutivo, nos quedamos con la miel en los labios de poder saborear la fase final del Trofeo Rector de fútbol-sala.
A pesar de haber sumado cuatro puntos y de que dependíamos de nosotros mismos en el último encuentro ante la Residencia Alfonso VIII, el hecho de que el sorteo nos deparó el grupo en el que eran dos –y no uno– los equipos que quedaban en la cuneta, nos ha privado de luchar por los puestos de honor.
Dentro de lo que ha sido una tónica habitual a lo largo de la presente temporada, el equipo del Colegio Mayor Peñafiel afrontó el último choque de la fase regular con bajas. Quizás, con más bajas de las esperables tratándose de una final.
Pero tampoco vamos a recrearnos en el hipotético caso de que hubiera pasado si todos los integrantes de la plantilla hubieran estado disponibles. Lo cierto es que los nuestros entregaron y se vaciaron en el terreno de juego del Ruiz Hernández.
Lo prueba que, pese a la goleada encajada, nos fuimos a por la meta rival hasta el pitido final. Nacho Zapico y Cristian fueron los goleadores; Gonzalo defendió la puerta; Alex, Javi Taboada, Fran y Pierre hicieron el resto, que no fue ni mucho menos poco.
Nos vamos con la cabeza alta y con la satisfacción de haber cumplido y, en consecuencia, con la expectativa de ver recompensado nuestro esfuerzo con un cena en VallSur.
No hay comentarios:
Publicar un comentario